La vocación de servicio que tenemos los rotarios del RC Barcelona'92, trasciende hasta nuestra familias. Ante la incipiente penuria económica derivada del parón de la actividad económica provocada por el Covid-19, son muchas las familias de nuestra ciudad que están viéndose obligadas a acudir a comedores sociales y organizaciones de ayuda para cubrir sus necesidades más básicas.

En esta ocasión han sido las parejas de los miembros del Club las que promovieron recientemente la compra de alimentos no perecederos para ser distribuidos entre las personas que acuden a diario a la Parroquia de Santa Ana de Barcelona. Así, durante el fin de semana de 23 de mayo, nuestro Club fue capaz de recoger hasta 300 kg de alimentos que fueron llevados, entregados y depositados en dicha parroquia, con el fin de paliar las situaciones, dramáticas muchas veces, a las que los medios de comunicación nos están acostumbrando últimamente. Esperemos que esta situación tenga un fin lo más próximo posible. Entretanto Rotary y nuestro Club, estaremos pendientes de todo ello.